¿QUÉ ES UN TRATAMIENTO FACIAL Y CÓMO ME AYUDA?

Desde la exposición solar hasta la contaminación, tu rostro está expuesto todos los días a elementos que pueden dañar tu piel a largo plazo y sabemos que cuentas con poco tiempo para darle la atención que necesita. No te preocupes, existe una solución, los tratamientos faciales son la mejor respuesta para el mundo ajetreado en el que vivimos, ya que se centran en los problemas principales de tu piel y son tan eficaces que no es necesario hacerlos diariamente, pero si hacerlo de manera constante para tener resultados a largo plazo.

¿En qué consiste un tratamiento facial?

Un tratamiento facial es la manera más popular de mejorar la piel sin recurrir a la cirugía y está diseñado para hacerte ver y sentir más radiante, joven y revitalizada.

Los faciales son tratamientos para devolverle al rostro su aspecto terso y saludable, equilibrando la piel y dejándola suave y fresca dándote así una sensación de relajación al instante.

Lo que es bueno saber…

¡Sé cuidadosa! Existe una gran variedad de tratamientos faciales en el mercado y elegir el correcto puede ser algo confuso. Un tratamiento inapropiado o un abuso de productos pueden afectar a tu piel privándola de los nutrientes esenciales e incluso de sus defensas naturales. La piel puede presentar manchas y granitos hasta llenarse de finas arrugas y lograr el efecto contrario de lo que se busca con un tratamiento, incluso puede llegar a verse seca y apagada.

Es importante también identificar tu tipo de piel, dependiendo de su contenido de agua y grasa. En cambio, el estado de la piel depende de la alimentación, el nivel de estrés, el tabaco y la cantidad de agua que bebas diariamente entre otros.    

Idealmente, en una visita a un centro especializado en tratamientos para la piel, pueden identificar el tipo de cutis que tienes y te recomendarán el tratamiento que tu piel necesita para estar en su mejor condición.

¡Ve con tiempo! Necesitarás unos 30 minutos para un mini tratamiento facial y hasta dos horas para un tratamiento más completo. Algunos resultados se harán visibles inmediatamente y otros no podrás observarlos hasta un par de sesiones después.

¿Qué tipos de tratamientos existen?

Los faciales que se ofrecen en los spas o en los salones de belleza son mucho más que el limpiador, el tónico y el hidratante básico de siempre. Por ejemplo, algunos de los más típicos son:

• El vapor, para abrir los poros y favorecer su extracción.
• El exfoliante o peeling, para retirar las células muertas de la piel.
• Los masajes, para relajar, drenar toxinas y estimular la circulación.
• Las mascarillas, para reafirmar, rehidratar e iluminar el cutis.
• Incluso si lo que deseas por encima de todo es conseguir una gran luminosidad, tu facial puede emplear alta tecnología y prácticos tratamientos para revitalizar tu piel.

¿Cada cuánto tiempo tienen que hacerse los tratamientos faciales?

No hay una respuesta exacta. El mínimo es una vez al año, el máximo depende de cada tipo de piel. Una piel normal puede hacerse una limpieza de cutis cada tres o cuatro meses. Las pieles maduras o muy secas necesitan más ayuda, con lo que podrían hacerse una cada seis semanas como mucho. Las pieles más problemáticas pueden incluso necesitar una limpieza más a menudo.

El tiempo hace que las células sanas y jóvenes se deterioren y da a la piel un aspecto más apagado. Además, nuestro rostro está expuesto a la intemperie (sol, viento), y estos factores, junto con las expresiones faciales repetitivas, hacen que aparezcan arrugas y líneas de expresión.

¿Cuáles son los beneficios de los tratamientos de limpieza facial?

Algunos de los grandes beneficios son:

1. Permite la oxigenación de la piel.
2. Los productos cosméticos destinados a mejorar el aspecto de la piel tienen mayor eficacia.
3. Retrasa la aparición de arrugas.
4. La piel es más luminosa.
5. Ayuda a disminuir la apariencia de cansancio.
6. Elimina el acné y los puntos negros.
7. La piel luce más suave y tersa.
8. Una piel limpia acepta y muestra mejor el maquillaje.

Esperamos que en estas páginas hayamos resuelto algunas de tus dudas. Recuerda siempre consultar la opinión de un experto antes de tomar cualquier tratamiento.